En
nuestro pedido de veto parcial, presentado al Jefe de Gobierno de la Ciudad
Autónoma de Buenos Aires el 4 de octubre de 2011 expresamos:
No es legítimo que los poderes
constituidos, bajo la espuria argumentación de verse “superados” por la
realidad sobre la que deben operar, declinen sus responsabilidades
constitucionales, ni que mediante normas “anémicas” creen situaciones de excepción
que hacen inaplicables los principios que –fundados en la razón- constituyen
las bases sólidas de una política de estado.
No hay argumento válido para no respetar siempre la prioridad de paso, el
semáforo en rojo o la velocidad máxima permitida. Estos son los tres principios
fundamentales de un consenso social dirigido a un tránsito no violento. No
podemos resignarlos.
Finalmente
logramos que dos legisladores presenten un proyecto para enderezar el entuerto
creado por intereses inconfesables:
La
fundamentación de los diputados Fernando Sánchez y Maximiliano Ferraro de la (Coalición
Cívica) es sencilla, impecable: la
modificación que proponemos no se dirige a endurecer penas toda vez que el
infractor puede seguir
conduciendo, pero se encuentra obligado a concurrir ante la autoridad pública
para recuperar su licencia y ello convierte a la retención en una medida
preventiva, educadora, una herramienta más en el camino de la construcción de
ciudadanía vial.
El
proyecto que lleva el número 1739 -D-2012, presentado el 28 de junio pasado, propone
que se debe retener la licencia habilitante al infractor cuando
1) se
superen los límites de velocidad máximos establecidos en el Código y
2) cuando se viole la prohibición de paso indicada por un semáforo.
2) cuando se viole la prohibición de paso indicada por un semáforo.
Esperamos
que la retención provisoria de Licencia no tenga ya excepciones para su aplicación
efectiva en la Ciudad de Buenos Aires y que las interpretaciones interesadas y caprichosas
ya no violenten nuestra seguridad para transitar.
No hay comentarios:
Publicar un comentario